Un análisis de los mensajes subliminales en las películas de la compañía

Disney ha sido la infancia de la mayoría de los niños y las niñas, pero eso no significa que todo lo hayan hecho bien. Muchos de sus cuentos se han mostrado arcaicos y obsoletos en la actualidad con todas las nuevas conversaciones sociales que se están dando y la mayor importancia que poco a poco va recibiendo la salud mental. Hablar de nuestros problemas está en auge, ya iba siendo hora, por esta razón muchos se han dado cuenta de que lo que se les ha vendido desde pequeños como la vida perfecta realmente no era la vida real. Además, de los micromachismos que hemos ido recibiendo. El típico príncipe salvador, la pelea entre mujeres, los hombres siendo siempre más fuertes y las mujeres más frágiles… Todo esto ha ido creando una idea en las mentes juveniles que es importante romper.

Cuentos de Disney/Foto de Cinco Noticias

Nadie necesita un príncipe que le salve o que le haga feliz, todo el mundo es autosuficiente. Frases como “fueron felices para siempre” quedan muy atrás, y es que no, no lo fueron, tuvieron sus problemas y algunos fueron tan graves e inaceptables que hicieron que todo se rompiera, y no fueron unos fracasados por no aguantar carros y carretas, más bien supieron reaccionar a tiempo. Esa sería una mejor manera de acabar los cuentos y las películas para enseñar a los más jóvenes lo que son los límites.

BLANCANIEVES Y LOS SIETE ENANITOS (1937)

Cuando la reina de Blancanieves se preguntaba quién era la más hermosa del reino, por el estereotipo de que lo más importante es la belleza en las mujeres para triunfar. La belleza es muy subjetiva y no hay que acogerse a unos cánones definidos que son bastante irreales en este mundo tan diverso. Además, obviamente cada vez que hay alguien limpiando, cocinando o cuidando se trata de una mujer porque socialmente estos eran los trabajos que debían realizar ellas. Según las lingüistas Carmen Fought y Karen Eisenhauer solo el 11% de los diálogos de estas películas van dirigidos a logros y cualidades.

LA BELLA DURMIENTE (1959)

También cabe destacar la de violencia en pequeñas dosis que se consume con estas historias. Como el hecho de que el príncipe de Blancanieves le bese sin su consentimiento y el de La Bella Durmiente al igual, que la Sirenita le entregue algo tan suyo como su voz a cambio de poder salir al exterior por un hombre (esto sería el estereotipo de que las mujeres solo hacen las cosas por y para agradar a los hombres), la lucha entre mujeres por un joven de la Cenicienta… Y por supuesto, todo relaciones heterosexuales, porque la diversidad no es algo que se tuviese muy en cuenta.

El beso de La Bella Durmiente/ Fotograma de La Bella Durmiente

LAS NUEVAS PRINCESAS

Poco a poco se van creando cuentos donde las mujeres van cobrando mucha más importancia y no necesitan de ningún hombre que les salve o aparecen otro tipo de relaciones. Pero aún queda mucho por pelear, aunque tenemos a Elsa, Moana y Mérida, por ejemplo.

Marina Polo

Marina Polo

Está interesada en los eSports, en la escritura, la lectura, las series y las películas. Ha trabajado como auxiliar de información en las playas de Campello, como escritora en una Newsletter, como redactora...

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